La columna vertebral sirve de soporte al cuerpo, y permite los movimientos en cualquier sentido. Sin ella nos veríamos obligados a reptar sobre la barriga, y algunas expresiones como "no tiene espinazo" ("sin valor") apuntan en el sentido del patrón psicosomático que representa la columna vertebral.
Las personas que obtienen gracias a la práctica del yoga sensibilidad corporal, se habrán dado cuenta de que la presencia de tensiones en el entorno personal o los sucesos adversos en la vida cotidiana, se hacen notar inmediatamente en forma de rigidez de la columna vertebral. Cuando hay un conflicto, la prioridad del cuerpo es proteger el sistema nervioso, y los músculos conectados con la columna entran en espasmo para evitar la movilidad.
También, el estado de la columna permite algunas deducciones en cuanto a la autoestima de una persona. Una diferencia de escasos centímetros en porte y actitud revela lo que una persona piensa de sí misma y en qué medida es capaz de enfrentarse a las responsabilidades de su vida. Asimismo, la flexibilidad de la columna tiene que ver con la flexibilidad de carácter, es decir la disposición para admitir nuevas ideas y obligaciones.
Las causas de dolencias de la columna vertebral pueden ser de origen tanto psíquico -baja autoestima- como físico, por ejemplo la falta de ejercicio, mala postura o realizar trabajos que fuercen demasiado la columna.
El yoga te puede aliviar el dolor de espalda alta, de cuello y de espalda baja. El dolor de espalda que no es provocado por un nervio pellizcado, con frecuencia, es causado por un desequilibrio muscular y una mecánica de la columna poco óptima.
En todos los sentidos es fundamental mantener posturas corporales correctas: Imaginemos que alguien nos tira de un hilo atado en la parte más alta de nuestro cráneo. Al visualizar mentalmente esta idea podrás sentirte más ligero; los hombros y el tórax se relajan, la columna vertebral y el cuello se alinean y el centro de gravedad se proyecta entre los pies.
Las personas que obtienen gracias a la práctica del yoga sensibilidad corporal, se habrán dado cuenta de que la presencia de tensiones en el entorno personal o los sucesos adversos en la vida cotidiana, se hacen notar inmediatamente en forma de rigidez de la columna vertebral. Cuando hay un conflicto, la prioridad del cuerpo es proteger el sistema nervioso, y los músculos conectados con la columna entran en espasmo para evitar la movilidad.
También, el estado de la columna permite algunas deducciones en cuanto a la autoestima de una persona. Una diferencia de escasos centímetros en porte y actitud revela lo que una persona piensa de sí misma y en qué medida es capaz de enfrentarse a las responsabilidades de su vida. Asimismo, la flexibilidad de la columna tiene que ver con la flexibilidad de carácter, es decir la disposición para admitir nuevas ideas y obligaciones.
Las causas de dolencias de la columna vertebral pueden ser de origen tanto psíquico -baja autoestima- como físico, por ejemplo la falta de ejercicio, mala postura o realizar trabajos que fuercen demasiado la columna.
El yoga te puede aliviar el dolor de espalda alta, de cuello y de espalda baja. El dolor de espalda que no es provocado por un nervio pellizcado, con frecuencia, es causado por un desequilibrio muscular y una mecánica de la columna poco óptima.
En todos los sentidos es fundamental mantener posturas corporales correctas: Imaginemos que alguien nos tira de un hilo atado en la parte más alta de nuestro cráneo. Al visualizar mentalmente esta idea podrás sentirte más ligero; los hombros y el tórax se relajan, la columna vertebral y el cuello se alinean y el centro de gravedad se proyecta entre los pies.
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